viernes, 20 de abril de 2007

UN POCO DE MERCHANDISING


Casi tan pronto como nace el cine como industria, los actores se convirtieron en un buen reclamo para llevar al público a los cinematógrafos. Al igual que ahora, la presencia de un actor/actriz favorito era suficiente para que el público acudiera a las salas, lo que motivo que pronto sobresalieran los más populares, al principio por decisión del público y más tarde por prioridades promocionales. Una parte importante de esta promoción se basaba en publicar artículos sobre la vida y carrera de estos actores, que más tarde dieron paso a las revistas cinematográficas. Los estudios fotografiaban a los principales actores o a los últimos descubrimientos escribiendo sobre ellos en muchos casos ficticias biografías que poco o nada tenían de verdad, pero que hacían suspirar a los primeros admiradores de esa primeras figuras de la talla de Douglas Fairbanks, Mary Pickford, Charlie Chaplin, Rodolfo Valentino e incluso nuestro Chaney.

Una forma de promoción era la de obsequiar cromos en diversos productos, que abarcaban desde el chocolate a uno muy popular sobre todo en Inglaterra: con el tabaco, que constituían extensas colecciones de diversos temas, entre los que los de más calado popular eran los dedicados a las estrellas del séptimo arte.

Este cromo, de curiosa forma ya que lo habitual es que fueran de formato rectangular y de más o menos de 6'5 x 3'5, formaba parte de una colección de cromos circulares que se difundió sobre el año 1923, ya que al dorso como era ya habitual, se incluyen unas notas biográficas que especifica como reciente el gran éxito Hunchback of Notre Dame. En este ejemplo es recalcable la estupenda calidad fotográfica de la imagen.









lidad fotográfica de la imagen.


lunes, 16 de abril de 2007

A BLIND BARGAIN (1988, Philiph J. Riley, MagicImage Filmbooks)

Después del inesperado, pero merecido éxito del anterior libro del autor, este no duda en escribir una obra similar sobre otra de las grandes películas perdidas del actor Lon Chaney. El reto es aún más difícil si cabe que el anterior, ya que de la película escogida han sobrevivido menos imágenes, además de que cuenta con menos testimonios de personas que recuerden el film.

En todo caso esta faraónica obra se beneficia de una gran baza: su impecable calidad de impresión que da a sus imágenes una belleza y una fidelidad que se hecha en falta en el anterior libro (y más si se comparan ambas obras).

Riley recopilaría muchos guiones de la época dorada del cine de terror de los estudios Universal y volvería a tratar con Lon Chaney en un estupendo, y al igual que todas sus obras, detallado libro centrado en el clásico The Phantom of the Opera, film por el que Lon Chaney pasará (un tanto injustamente) , a la posteridad conjuntamente con su interpretación en The Hunchback of Notre Dame.









miércoles, 28 de marzo de 2007

LONDON AFTER MIDNIGHT (Philiph J. Riley,1985 Cornwall Books)
























Este primer libro representa todo una proeza de fan ávido de reconstruir una cinta que se resiste a dar por perdida. La obra está perfectamente editada y profusamente ilustrada, aunque la calidad de impresión lamentablemente no alcanza la calidad que se podría desear, y más después de haber visto la obra posterior, mucho más lograda en este sentido. Con prólogo del mismísimo Forrest J. Ackerman, se nos ofrece el guión original de la película y una reconstrucción de la misma en formato fotonovela con los títulos intercalados con las imágenes.
Como nota curiosa el resaltar la reconstrucción fotográfica del mismo film que ha realizado Rick Schmidlin ya en formato digital con banda sonora y títulos que está incluida en el maravilloso dvd LON CHANEY COLLECTION,editada por Warner Bros y que contiene además los films THE ACE OF HEARTS (Worsley, 1921), LAUGH, CLOWN,LAUGH (Brenon, 1928), THE UNKNOWN (Browning, 1927) y el documental LON CHANEY: A THOUSAND FACES. Una estupenda colección que pide a gritos una continuación.
A pesar de hacer un tiempo de su edición, con paciencia se puede conseguir escarbando por ebay, aunque el precio no acostumbra a ser bajo, aunque eso si, os aseguro que tras leer esta obra deseareis que pronto se tengan noticias sobre una copia recuperada de este seminal film de vampiros, en el que Lon Chaney volvió a innovar con su fantástico (y como todos) autodidacta maquillaje, del que han sobrevivido tanto el sombrero de copa como los dientes, que la familia Chaney cedió al super-coleccionista Ackerman.






martes, 27 de marzo de 2007

LIBROS SOBRE PELICULAS PERDIDAS


























Realmente es loable la labor efectuada por el escritor y estudioso del cine de terror clásico Philip J. Riley, que además de recuperar y editar guiones originales de clásicos de la Universal como Drácula (Browning, 1931) The Son of Frankenstein (R.W. Lee, 1939) o incluso The Phantom of the Opera (R. Julian, 1925), no dudó en intentar realizar el sueño perseguido por cinéfagos de medio mundo intentando recuperar films perdidos, aunque sea por medio de libros dedicados a ellos en los que ha reunido todo el material gráfico disponible, además del guión original.
Así lo hizo con dos de las obras perdidas más buscadas del cine mudo, ambas protagonizadas por Lon Chaney: LONDON AFTER MIDNIGHT (Browning, 1927) y A BLIND BARGAIN (Worsley, 1922).
Estas cintas forman parte de un largo listado de películas desaparecidas, situación que se puede haber dado por diversas razones: porque el material se haya descompuesto o porque el estudio decidiera desprenderse de un cine que daba por caduco, ya que con el sonido todas estas obras pasaron a ser olvidadas por unos estudios que prefirieron realizar nuevas versiones de los éxitos más sonados. Sin ir más lejos, el mismo realizador de la original, Tod Browning, dirigió la nueva versión sonora de London After Midnginht, con la nueva estrella del terror, Bela Lugosi, con el nombre de MARK OF THE VAMPIRE en 1935. Pero la versión muda sin duda tiene un halo de leyenda que hace que no se pierda la esperanza de que cualquier dia en alguna filmoteca o en alguna colección particular, se pueda localizar alguna copia que permita disfrutar del arte de Chaney y de su increible maquillaje de vampiro. No hay que olvidar que uno de los proyectos que tenían tanto Chaney como Browning en cartera era la realización de Drácula, película que tuvo que afrontar en solitario el director ante el prematuro fallecimiento de Chaney.
De momento estas cintas no han aparecido, pero afortunadamente hay suficiente material como para hacerse una idea muy cercana de como serian, y reuniendo todo el material posible, el señor Riley ha conseguido reconstruirlos dignamente en dos libros editados dentro de la coleccion Ackerman archives, responsabilidad del famosos editor de la revista Famous Monsters, con el que Riley trabajó en su juventud.
Pasemos a analizar los libros:










lunes, 26 de marzo de 2007

domingo, 25 de marzo de 2007

¿POR QUE EL HOMBRE DE LAS MIL CARAS?

Pues principalmente porque es el apodo que tiene mi actor de cine favorito (o uno de ellos), el inmortal Lon Chaney, que sin duda perdura como uno de los creadores más importantes del arte cinematográfico cuando aún era un milagro mudoy que llegó a su máxima expresión poco antes de que fuera truncado con el sonido, creándose así otro arte muy distinto al silente. Chaney fue uno de las más importantes actores y sus creaciones aún son legendarias entre los más importantes artistas del maquillaje. Sirva pues este ladrillo para intentar explicar el título de esta página.